Al percibir el Yoga como un estado de conciecia, es posible reconocerlo como algo que está más allá de los conceptos de una práctica. Así, es claro que al estar consciente del estado actual del cuerpo y del entorno, naturalmente la relación de respuesta al medio nos permite mantener una actitud definida para cada acción en particular.
De esta forma es como surge la medicina yogika, que es conocida como Ayurveda, que consiste en formas y fórmulas muchas de ellas simples y experimentadas por haber sido pasadas durante generaciones. Acciones que nos auxilian a recordar y conectarnos con nuestro nexo de armonia y equilibrio. Acciones que nacen de la simplicidad y precisión de los actos conscientes.
Según David Frawley “Ayurveda es la rama curativa de la ciencia yogika y el Yoga es a su vez el aspecto espiriual del Ayurveda”.
Tanto una como otra afirman que existe una “unidad interactiva”entre el cuerpo, la mente y el universo, una inteligencia que se encuentra siempre presente en todas las manifestaciones.
El Ayurveda es un universo que nos proporciona formas de gran sabiduría para que podamos permanecer saludables y de esta forma prolongar la vida de nuestros órganos, células y mente, manteniendo nuestro cuerpo vivo en un potencial alto.
Las acciones correspondientes a una vida saludable se relacionan de forma directa con nuestras rutinas diarias, con el objetivo de mantener la salud, optimizando al máximo las influencias presentes en la naturaleza.
Ayurveda es sinónimo de un modo adecuado de vida por la relación que existe entre nosotros y los períodos del día y de las estaciones del año, por medio de tratamientos específicos, buenos hábitos además de conductas apropiadas.
Estos buenos hábitos se inician en el momento en que despartamos y se extienden hasta el momento de irnos a dormir.
Yoga es sinónimo de unión y a través de la respiración, concentración, relajación, meditación, asanas y pranayamas. De esta forma se logra unir el cuerpo físico con el espíritu, la mente y las emociones.
Yoga y Ayurveda provienen de la tradicional India y comparten un mirada similar en la creación de un estilo de vida saludable. El Yoga se basa principalmente en posturas físicas y en la limpieza de la mente. Ayurveda es una forma natural de sanación.
El Ayurveda le brinda al Yoga un gran soporte para su práctica, complementando el Yoga como el Yin complementa el Yang. Tradicionalmente la escuela de Yoga ha enseñado las asanas conjuntamente a la filosofía ayurvédica.
Además, al comenzar con las posturas de Yoga activas también se comienza a desintoxicar el cuerpo de todas aquellas toxinas que se encuentran acumuladas.
El Ayurveda ayuda a complementar la experiencia del Yoga, siendo prácticas hermanas que tienen miles de años a pesar que ambas se enfocan en como purificar el cuerpo de dos formas distintas.
Al ser ambas prácticas interrelacionadas será efectivo el enfocarse en las dos de forma simultánea.
Siguiendo ambas prácticas la salud física y mental mejoran y pueden también prevenirse enfermedades prolongando el periodo de vida.