Una buena alimentación puede curar ciertas enfermedades o prevenir ciertas complicaciones, es el caso de la diabetes o del colesterol. Pero, una buena alimentación no basta, debe asociarse a una buena higiene de vida. Por el contrario, con relación al cáncer, la alimentación no puede curarlo, pero sà limitar sus riesgos.
Prevención y alimentación
Las enfermedades cardiovasculares, como el ictus cerebral o el infarto, vienen favorecidas por la diabetes, el colesterol, la hipertensión arterial y el tabaco. En el caso de la diabetes, y del colesterol, una buena higiene de vida permite, en la mayorÃa de los casos, curarlas.
Las proteÃnas
Se debe dar prioridad a las proteÃnas vegetales como la soja. Las carnes rojas deben limitarse a una ingesta de no más de 2 ó 3 veces por semana, y la charcuterÃa debe eliminarse por completo de la dieta.
Los lÃpidos
Los lÃpidos corresponden a las grasas. No dudéis en comer pescado en vez de carne, es rico en omega 3 y 6, ácidos grasos, buenos para el sistema cardiovascular. Además, incluso el pescado más graso es menos rico en grasa que cualquier tipo de carne roja.
Los glúcidos
Pueden ser lentos como las féculas, o rápidos como el azúcar. Evitar en la medida de lo posible los alimentos ricos en azúcar, como las bebidas azucaradas o la reposterÃa. Idealmente, una alimentación equilibrada comprende los siguientes aportes calóricos: 55% de glúcidos, 15% de proteÃnas, y 30% de lÃpidos.
Para luchar contra la hipertensión, debe aplicarse el mismo régimen, intentando además, reducir la ingesta en sal.
Una buena higiene de vida asociada
La actividad deportiva frecuente, de unos 30 minutos de deporte diario. Si no es posible, al menos debe ser de 45 minutos, tres veces por semana.
Dar prioridad a una actividad fÃsica que os guste, puesto que será más fácil que os motivéis todos los dÃas, y poder continuarla a lo largo de los años. El tabaco debe dejarse definitivamente. La ingesta de alcohol debe ser ocasional.