Llegadas estas fechas navideñas, es cada vez más usual que muchas personas no quieran seguir los ritos de siempre, o simplemente por la pura necesidad quieran dar un toque diferente al año nuevo o a las fiestas en general.
En los últimos años, es cada vez más usual ver personas que utilizan el deporte como un alternativa a las fiestas alcohólicas y discotecas de fin de año. Esto que puede resultar a priori algo desconcertante, puede ser muy divertido y de hecho, años tras año gana más adeptos.
Por ejemplo, aunque hemos de admitir que es algo «curioso» se ha puesto de moda subir montañas la noche de fin de año. Esto en verdad está muy relacionado con los antiguos mitos y tradiciones celtas, que buscaban la unidad entre el hombre y los astros. Asà que porqué no unas fiestas con algo de deporte.
Otra opción, es salir a correr en grupo antes de las propias fiestas, sin ir más lejos, podemos encontrar estos grupos de intrépidos por las carreteras y parques, mientras unos llevan sillas y comida de arriba a abajo, ellos queman calorinas.
Una también muy tÃpica es las tradicionales pruebas deportivas del dÃa 1. Por ello, muchos optan por descansar y hacer vida normal la noche del 31, para estar a tope esas primeras horas del año. Como pruebas más mÃticas, tenemos el baño de primer de enero de Barcelona, en que ayudados por caldos y mucha energÃa, algunos socios del club de natación realizan una pequeña carrera en el mar helado. Los disfraces aunque opcionales, son cada vez más recurridos.
Tampoco debemos olvidarnos, de otras opciones, como por ejemplo las carreras populares de primero de año, o las salidas en bicicleta, todo esto, si encima el primer de enero coincide con buen tiempo, dan aún más ganas. Después de tantos atracones, no hay nada mejor que un poco de ejercicio sano para empezar a ponernos a tono de cara a la cuesta de enero y la operación que nos reduzca todos los caprichos ingeridos fuera de nuestra dieta normal durante las fiestas.