Uno de los temas que más polémica suelen suscitar suele ser el mejor calzado en montaña durante el verano. No es un tema poco importante, ya que una de las cosas más importantes cuanto estamos allà arriba es que nuestros pies tengan el cuidado adecuado, y más, si decidimos alistarnos en alguna carrera de montaña o alguna caminata larga. El principal objetivo de un buen calzado de montaña es que nuestro pie se mantenga fuera de las inclemencias del tiempo y de los elementos, y que esté lo suficientemente cómodo como para que pueda realizar kilómetros en un buen estado.
Cabe recordar que los pies son un elemento muy importante, ya que un dolor en ellos, o incluso una molestia, puede retrasar todo un grupo, y por ello, hacer de una agradable salida un infierno. Normalmente en invierno lo que más se busca es el aislamiento respecto a la humedad y a la nieve, en cambio, cuando llega el verano, el elemento principal que debe tomar nuestro mayor cuidado es justamente la transpiración. Por eso, también debemos hacer un alto en el tipo de calcetÃn, ya que será el otro complemento que deba asegurarnos el confort en los pies.
AsÃ, es habitual que en verano, con la calor y una humedad algo diferente, los calzados de los montañeros se modifiquen considerablemente. Por ejemplo, es bastante normal, cambiar las botas altas y macizas del invierno por unas bambas de trecking, mucho más ligeras y transpirables.
De igual forma, muchos utilizan esta etapa del año para desmelenarse y realizar las ascensiones que en invierno no podÃan o querÃan hacer, por ello, se puede limitar mucho el peso en los pies y en la mochila, haciendo los trayectos mucho más cortos y rápidos, mejorando entonces la capacidad que tenemos para llegar a cimas que antes se nos resistÃan.
Como veis, todo empieza por nuestros pies