Para todos aquellos deportistas que durante toda la temporada pasada se han pasado entrenando duramente para competir y conseguir éxitos deportivos, cuando llega el verano tienen una sensación rara, al principio agradecen el tiempo libre que tienen por la reducción en las horas de entrenamiento, y lo utilizan para divertirse y para hacer todo aquello que no han podido hacer durante el año, pero pronto se cansan de la situación y se aburren, necesitan algo, y solo entrenar por libre no es suficiente.
Por ello, muchos deportistas utilizan el verano para trabajar de monitores o coordinadores en diferentes escuelas, gimnasios o todo aquel recinto que tenga algo de deporte entre su programación veraniega. Los campus de verano de las escuelas son sitios ideales para encontrar algún trabajo veraniego sin muchas expectativas de futuro.
Esto es ideal, ya que no hay nada mejor que realizar un trabajo remunerado por una actividad que te vuelve loco, y por qué no, el deporte puede ser también una fuente de ingresos para aquellos deportistas semi-profesionales que disponen de este tiempo libre en verano.
Por supuesto, hay trabajos de todo tipo, pero también es una fuente inédita de ingresos para aquellos deportistas más jóvenes, sobre todo de deportes de equipo, que acostumbrados al trabajo en equipo y los entrenamientos a cargo de un entrenador, se ven más limitados a entrenar en verano, ya que no saben ni por donde comenzar.
Esta práctica, el trabajar en algo relacionado con el deporte en verano, es algo bastante extendido, por ello no faltaran oportunidades, y existen varias redes por internet que facilitan estos pactos, de hecho, en tu propia entidad seguro que montan algunas actividades veraniegas para los más pequeños del lugar y no saben donde ni a quien contratar para monitorizarlos.
Por eso, el verano también puede ser una fuente de ingresos para aquellos que no quieran seguir entrenando en solitario.