Las bajas temperaturas y la luz ténue tÃpica del invierno permiten entrenar de manera eficiente y divertida, diversas actividades al aire libre y los deportes sobre nieve nos permiten mantenernos en forma sin subir de peso, sin embargo es importante tener algunas precauciones para evitar lesiones, problemas de salud y algunas otras consecuencias indeseadas.
La National Athletic Trainers Association (NATA), ofrece una serie de consejos simples y sencillos que nos permitirán disfrutar del ejercicio al aire libre en invierno para permanecer activos de forma segura, aún en meses de frÃo.
1. Realizar un buen calentamiento que prepare los músculos para el ejercicio y no olvidarse de hacer estiramientos al finalizar de entrenar para evitar lesiones y favorecer la recuperación tras el esfuerzo.
El frÃo constriñe los músculos, por lo que es necesario dedicar tiempo suficiente al estiramiento para calentar las fibras musculares antes de hacer ejercicio; mientras que al finalizar es necesario regresar a la calma, aquà los estiramientos ayudan a mantenernos ágiles y flexibles.
2. Utilizar calzado adecuado que se ajuste bien a los pies y evite que se mojen y enfrÃen. Las mejores opciones son aquellas elaboradas a base de materiales aislantes, como el Gore-Tex, de alta impermeabilidad y que permiten que la piel transpire y no se moje por la imposibilidad de evacuar el sudor.
3. Antes de entrenar ingerir alimentos que permitan mantener la energÃa durante la actividad, son apropiados los cereales integrales, los frutos secos y las bebidas necesarias para no deshidratarse.
4. Siempre que utilice la indumentaria correcta, podrá continuar con sus actividades de verano, como caminar o correr al aire libre, aunque los deportes de invierno como el esquÃ, patinaje sobre hielo o snowboard son actividades aeróbicas excelentes que, además, tonifican brazos y piernas para lucir en forma cuando llegue la primavera.
5. Quitar nieve es una actividad de alta intensidad, pero requiere de la técnica y posición correcta para evitar dolores y lesiones de espalda, cuello y hombros. Por eso, todas las actividades deben iniciarse de a poco y efectuarse con la técnica adecuada.
6. Si el ejercicio al aire libre durante los meses frÃos resulta muy duro, se puede optar por un gimnasio o entrenarse en lugares cerrados. Por supuesto, siempre la indumentaria debe ser apropiada, al igual que la técnica, la intensidad, la duración y el tipo de actividad que se realiza.
Con estos cuidados básicos, y un chequeo médico que siempre debe estar presente antes de cualquier ejercicio u entrenamiento, se podrá disfrutar de los deportes de invierno, asà como de las actividades al aire libre en momentos de frÃo, sin riesgos y con mayor seguridad.