Las regiones españolas que dedican parte de sus tierras a la vitivinicultura presentan una alternativa excelente de turismo para el otoño a través de sus Rutas del Vino.
Vivir la experiencia única de ser enólogo o bodeguero por un par de dÃas y conocer de primera mano todos los secretos de la elaboración del vino desde el comienzo, reviviendo las viejas tradiciones y el estilo de vida de las comarcas vitivinÃcolas.
Excelentes catas de vino y maridajes son algunas de las ofertas que pueden disfrutarse recorriendo alguna de las 21 Rutas del Vino que hoy existen y que abarcan igual numero de territorios donde se combina la cultura y el modo de vida a través del quehacer cotidiano de la producción del vino.
Durante el recorrido de cualquiera de estas Rutas del Vino podrá vivirse la experiencia de la cosecha y la preparación de los vinos de la temporada, además de variadas propuestas dependiendo de la región.
Asà por ejemplo, en Murcia la oferta es la llamada Ruta del Vino de Bullas que propone además su Taller de Vendimia, donde se dan a conocer todos los detalles que hacen referencia a la cosecha desde la recogida de la uva, recepción, clasificación y el primer prensado, sumándose a esto paseos por los viñedos, comidas campestres y hasta una visita al Museo del Vino.
La Ruta del Vino de Jumilla, también ofrece diferentes propuestas y entre ellas se destacan las Jornadas Vendimia que se realiza durante todos los sábados del mes de octubre. Un evento organizado por las Bodegas Luzón y que ofrece actividades enfocadas a los niños. Otras bodegas como San Isidro, hacienda El Carche y Viña Elena disponen también de visitas guiadas.
El nacimiento del nuevo mosto que se da en la época de vendimia puede disfrutarse haciendo la Ruta del Vino del Marco de Jerez, con un programa de actividades donde se ensamblan varias actividades gastronómicas, musicales y culturales.
En Galicia, la Ruta del Vino de RÃas Baixas suma las propuestas de varias bodegas como las de MartÃn Códax, Pazo Baión, Bodegas La Val de Frades y Valmiñor. Todas ellas abren sus viñedos permitiendo a los viajeros ingresar y contactarse con las labores del campo.
En la región las Bodegas Terras Gauda, pone a disposición del turista un autobús para no perder ni un detalle del trabajo que se realiza para la recolección de la uva e inclusive propone jornadas a la luz de la luna y dormir en una bodega.
En la Ruta del Ribeiro, puede tomarse como punto de partida el Casal de Arman, un magnÃfico complejo enoturÃstico, donde puede disfrutarse también de uno de los mejores miradores sobre el Valle de Avia, además de conocer cómo se realizan las tareas de la vendimia de forma totalmente artesanal.
Existen otras tantas opciones, como la Ruta del Vino de Rioja Alavesa, la Ruta del Vino de Navarra y a los pies del Pirineo aragonés la propuesta es la Ruta del Vino Somontano.