La berenjena es una hortaliza muy versátil que se utiliza en muy variadas recetas, y que de a poco se está incorporando en el consumo de la gente que quiere verse saludable y comer rico. Es importante destacar que se emplea en la elaboración de salsas, y se consideran una guarnición ideal para carnes, pescados y huevos tanto en forma rebozada, asada o en revuelto.
La berenjena al igual que las hortalizas pertenecientes a la familia de las solanáceas, como el tomate, posee propiedades nutritivas. Es sumamente parecida a la calabaza ya que contiene 1,3 por 100 de proteínas, 0,2 por 100 de grasas y 4,8 por 100 de hidratos de carbono. Además, contiene un porcentaje muy elevado de agua que llega al 92 %.
Los minerales que se observan son el manganeso- muy importante para que las células puedan aprovechar la energía y realizar sus funciones-; y el potasio – imprescindible para la generación del impulso nervioso y para la actividad muscular normal, así como para el equilibrio de agua dentro y fuera de la célula-.
En los últimos años se ha hablado de las propiedades curativas de la berenjena para disminuir el colesterol y prevenir la arteriosclerosis. Sin embargo, falta un largo camino para llegar a la confirmación de la teoría. A su vez, tiene una actividad altamente antioxidante en la prevención de enfermedades degenerativas.
No hay que pasar por alta que la cantidad de 100 g de berenjenas dan origen a 27 calorías. Algo a tener en cuenta en una dieta hipocalórica.
El plato que hemos seleccionado como menú del día son las “berenjenas asadas”. Un plato muy exquisito y con muy bajo porcentaje calórico, ideal para los que están comenzando a hacer régimen.
Los ingredientes que lleva esta delicia son: 3 berenjenas, 1 pimiento, 1 diente de ajo, 50 g de almendras crudas fileteadas, 1 cucharada de miel, 1 cucharada de vinagre de Jerez, aceite de oliva, y sal.
Para comenzar con la receta debemos lavar las berenjenas, cortarlas en ruedas finas y espolvorearlas con sal fina. Dejar reposar aproximadamente por 10 minutos. Encender mientras el horno a 180°. Luego untar las berenjenas con aceite de oliva y colocarlas en el horno hasta que estén blandas y doradas. Tomar el ajo y cortarlo también en ruedas y reservarlo. A su vez cortar el pimentón en aros finos y apartar.
En una sartén poner un poco de aceite y freír el ajo y el pimiento. Cuando empiece a dorarse el ajo, incorporar las almendras y apagar el fuego. Añadir de inmediato la miel diluida en vinagre, dar unas vueltas a todo y verter sobre las berenjenas. ¡Y listo!
He aquí una receta súper sencilla que puedes tomarla como primer plato o como acompañamiento de una carne. ¿Te animas a incorporar a la berenjena a tu dieta? Seguramente que si.