La constancia, dedicación y disciplina que Raquel Hernández Olmo le ha puesto a su entrenamiento fitness la han convertido en la subcampeona del mundo en body fitness 2009 bajo las siglas IFBB.
Es un gran logro porque es la primera Copa del Mundo de fitness en la que participa Raquel, y logró la medalla de plata, en la categorÃa de hasta 163 centÃmetros, por detrás de la polaca Anna Szczotka.
Para llegar a ser subcampeona del mundo de fitness, ha tenido que trabajar muy duro durante los últimos cuatro años, un entrenamiento diario de aproximadamente dos horas incluyendo trabajo aeróbico y especÃfico, con una alimentación muy estricta basada en verduras y proteÃnas. Las frituras y los bollos están prohibidos, aunque Raquel reconoce que en ocasiones sà se puede permitir un pequeño capricho.
Realmente, Raquel Hernández es consciente de que su pasión por el fitness es «un estilo de vida, es algo que no tiene nada que ver con el resto de cosas. Se piensa en ello desde que te levantas hasta que te acuestas«.
Como cualquier persona, Raquel tiene un empleo, trabaja en una clÃnica de depilación láser como auxiliar de enfermerÃa, y planifica su tiempo de forma tal que puede coordinar su entrenamiento con la vida laboral, sin que eso le impida disfrutar de otras cosas como la música, la pintura o el dibujo.
Esta musculosa mujer con una simetrÃa muy femenina, asegura que cualquier persona podrÃa dedicarse al fisicoculturismo o al fitness: «Cualquier persona que le guste, tenga ilusión y le guste el deporte puede dedicarse a esto«.
En su caso, la pasión por el fitness ha existido desde siempre: «Siempre me encantó, me ha gustado desde siempre el gimnasio, el entrenamiento, la vida sana; y desde hace cuatro años me he preparado más para competir, es un poquito más complicado«.
Además, cree que en esta disciplina deportiva no es que haya poca difusión, «lo que hay es pocas chicas. Yo las animarÃa, se puede conseguir, es un deporte bonito, ¿por qué no?«, dice animando a las mujeres a practicar fitness más a menudo.
Sobre la visión que despierta el culturismo en la sociedad, a ella no le importan los clichés existentes: «Quien se dedica a esto es como quien se dedica al golf. Al fin y al cabo es un hobby. Yo lo considero asà y lo disfruto; cada cual que disfrute con lo que quiera«.
Con certeza veremos a Raquel en nuevas competencias tanto nacionales como internacionales, y a buen seguro se hará con varios trofeos en su prometedora carrera profesional en el fitness.