Englobando los conocimientos, las técnicas y también lo trucos que utilizaban los ninjas en sus tareas de espionaje el Cho Ho llega hasta nuestro días y no lleva a un mundo increíble.
El Cho Ho representan un conjunto de técnicas sumamente importantes en el pasado para los shinobi. Si te interesa sigue leyendo este artículo y descubrirás todo lo que los ninjas tenían presente a la hora de hacer su trabajo de espionaje.
Literalmente Cho Ho quiere decir “información secreta” y consiste en el “arte del espionaje” siendo uno de los principales deberes de los Ninja, junto con el sabotaje, incluyendo una habilidad imprescindible como la observación y la auto-observación de la propia conciencia y también los sentimientos.
En el pasado los ninjas utilizaban las técnicas de Cho Ho para espiar a sus enemigos pero también ya en esa época infiltraban agentes para recolectar información pero además también vigilaban las acciones de los otros.
Una disciplina íntimamente conectada con las técnicas de ocultación, escapa y la estrategia llamada Bo Ryaku, el Cho Ho era un compendio de toda la sabiduría ninja relacionada con el espionaje.
Así, el Cho Ho o “información secreta”, era utilizado por los ninjas antes de formar parte de un conflicto. La principal tarea del ninja era tener buena información dando prioridad por ejemplo para saber dónde estaba el enemigo y planear qué hacer.
Para obtener la información los ninjas trabajaban de forma discreta utilizando tácticas de espionaje complejas e impredecibles.
El buen sentido de la orientación era fundamental para realizar espionaje y no solo debía el ninja observar a su enemigo sino así mismo.
El entrenamiento siguiendo las claves del Cho Ho no solo exigía buenos reflejos sino también mejorar el arte marcial que practicaba el ninja con el bastón y el bojutsu.
5 Tipos de Espías Ninja
Existían cinco tipos de espías ninjas
1 – Tensei no Kan eran los agentes vivos y se utilizaban diferentes técnicas de Cho Ho para infiltrarse en el bando contrario y obtener información verdadera.
Utilizaban las diferentes técnicas de Cho Ho para infiltrarse en el bando contrario y regresar con información verdadera.
2 – Inko no Kan o Dakkonin eran los agentes nativos o también llamados espías locales que trabajaban dentro del bando contrario. Además, eran bilingües para trabajar con diferentes pueblos a la vez, y obtenían información haciéndose pasar por extranjeros.
3 – Nairyo no Kan eran los agentes interiores empleados del enemigo que simpatizaban con el rival. Tanto podían ser funcionarios sobornados o traidores y su trabajo era transmitir información de vital importancia al enemigo por motivos personales o causales.
4 – Hantoku no Kan, eran los “agentes doble” ya que era espías del enemigo que acababan cambiando de bando.
5- Shicho no Kan eran también conocidos como “agentes liquidables“ pues se trataba de espías propios con información falsa, algo muy útil para causar una distracción en el enemigo en caso de captura.
Estos cinco tipos de espías tenían un trabajo conjunto que era denominado como el “Tejido del Cielo“ y se consideraba la base para obtener estabilidad y seguridad como pueblo ninja.
Técnicas Cho Ho de Espionaje Ninja
Para realizar todas las misiones que eran necesarias se seguían pautas muy bien pensadas, como el anonimato. La misión de cada ninja era un secreto para todos los demás excepto para aquel a quien se la había encomendado.
También era importante evitar ser reconocido, una de las máximas preocupaciones por lo que mantener la propia identidad en secreto era muy importante.
Asimismo, era esencial despistar al enemigo proporcionando siempre información falsa y hacerlo de manera accidental. Ya los ninjas con más experiencia llegan a dejar caer documentos con información falsa.
Los espías ninjas tenían varias identidades y conocerlas a la perfección era otra técnica de infiltración pues cada uno de ellos debía hacerse pasar por una persona diferente según la situación.
Esto facilitaba que no se reconociese al grupo de ninjas por una forma de actuar en concreto que se pudiese predecir o averiguar, y favorecía el factor sorpresa.
Apuntar a miembros de gran responsabilidad dentro del bando enemigo para reclutarlos era otra de las técnicas de los espías ninjas, ya que ese reclutamiento les permitía el acceso a importante información sobre los planes de sus rivales.
Saber actuar y dejarse capturar por el enemigo era el truco utilizado por los ninjas siguiendo las técnicas del Cho Ho y regresar con información verdadera.
Saber actuar y dejarse capturar por el enemigo para expandir información falsa y fingir que se traicionaba al propio bando para infiltrarse en el contrario como aliado.
Era una estrategia superadora para ganarse la confianza de los enemigos se realizaba algún acto valiente o se daba información falsa del bando al que “solía pertenecer”.
Gran parte de todo lo que hoy se conoce acerca del Cho Ho es gracias a documentos muy antiguos encontrados a comienzos de este siglo en una vivienda de Koka, en la Prefectura de Shiga, un lugar famoso por sus asentamientos ninja durante la época del Japón feudal.
El señor Toshinobu Watanabe guardaba 17 libros escritos por los antiguos shinobi sin saberlo y fue el Gobierno Municipal de Koka el encargado de realizar todas las investigaciones necesarias para datar los libros de texto escritos hacia 1670 o 1680.
Los 17 libros están conformados por 150 artículos y también 10 promesas que datan de entre 1700 y 1829, en los que el autor se compromete a mantener su estatus ninja en secreto y acudir anualmente a Owari para instruirse en artillería.