El mundo de las profundidades marinas es espectacular y misterioso y el buceo es una práctica que le permite al hombre adentrarse en sus secretos.
Ya desde la antigüedad la curiosidad de los humanos por conocer las profundidades de las aguas era grande y por ello muchos contenían la respiración para hacerse de productos muy preciados como los corales y perlas.
A través de los siglos se crearon y diseñaron diversos aparatos y mecanismo para proveerse de oxigeno y poder lograr estar un tiempo prolongado sumergido bajo el agua.
Sin embargo, los grandes adelantos en materia de buceo recién se lograron hace menos de 100 años cuando se lograron diseñar y crear trajes livianos que permitieran inmersiones ágiles.
Una evolución grande se registro en todos esos años ya que en 1935 se crean las aletas, en 1938 el snorkel y el famoso oceanógrafo Jacques Yves Cousteau crea a mediados del siglo XX el «aqualung» con el que se logró autonomía casi completa de movimiento en profundidades marinas, sin tener que estar conectados a la superficie a través de un tubo.
Variados y en una gran cantidad, fueron los sistemas diseñados y patentados que facilitaron el submarinismo como el chaleco hidrostático, computadoras especiales para buceo que permiten la realización de cálculos como por ejemplo de profundidad y velocidad de desplazamiento.
Existen muchas personas aficionadas y profesionales que se dedican a la práctica de buceo. Sin embargo, para hacerlo existen algunos requisitos como tomar un curso para aprender como evitar riesgos, manejo del equipo, reacciones físicas que pueden presentarse durante la práctica y las limitaciones que cada individuo tiene.
Quien desee practicar este deporte debe:
- Tener buena condición física.
- No padecer problemas de tipo cardiaco, respiratorio o neurológico.
- Realizar un examen médico con exhaustiva evaluación física, pruebas de laboratorio y diversas del sistema circulatorio y respiratorio.
- Tener más de 12 años
La práctica de submarinismo en España es una actividad que cada día suma más adeptos y uno de los sitios recomendables para su práctica es en Gran Canaria en la Reserva de la Biosfera de aguas cristalinas y un fondo marino variado y hermoso.
Debido a las corrientes que existen en la zona es común hallar grandes bancos de peces, siendo que gran cantidad de los mejores puntos de inmersión tienen acceso desde tierra, para llegar a otros es necesario de una embarcación, pero vale la pena para quienes deseen encontrar barcos hundidos, arrecifes y grandes cuevas.
Las inmersiones que pueden hacerse accediendo desde tierra son lugares ideales para la practica de snorkel o buceo con tubo ya que junto a la costa existe una cuantiosa fauna marina para admirar.
Dentro de los puntos de inmersión desde tierra están, Risco Verde, ideal para hacer buceo de noche, Taliarte, excelente para tomar fotografías y las Merinas, donde pueden verse anémonas gigantes y corales.
En cuanto a las inmersiones con acceso en embarcación, no se encuentran muy alejadas de la costa pero como son zonas profundas no es posible la práctica con snorkel o buceo con tubo.
Existen zonas de dificultad baja como por ejemplo donde se encuentra hundido el barco “Meteor II”, y a unos diez minutos de allí se encuentra la embarcación llamada “Arona”.
Inmersiones un poco más complejas, son las que se hacen en el arrecife artificial de Arguineguín y la del “Cermona II”.
Algunas pautas a tener en cuenta es por ejemplo siempre informarse sobre las condiciones meteorológicas y de mareas.
En las oficinas de turismo de Gran Canaria, se encuentra a disposición de quien la requiera una guía que resulta de mucha utilidad para la realización de las inmersiones, con datos de los clubes de submarinismo de la zona para obtener información.
Una excelente opción para todos aquellos que cultiven la práctica de este deporte y un lugar magnífico para disfrutar de la naturaleza.