A pesar que en la actualidad es común hablar sobre la cirugía estética y estar al tanto de todos los adelantos en esa rama de la medicina, también es cierto que existen muchos mitos acerca de ella y verdades que no siempre son conocidas.
Veamos entonces algunos de esos mitos y realidades sobre la cirugía estética:
Es un mito la creencia que es lo mismo cirugía plástica que estética. Ambos términos no significan lo mismo, ya que se utilizan las denominaciones “cirugía plástica” y “cirugía cosmética” como sinónimos cuando en realidad la cirugía cosmética es la que se encarga de la apariencia de una persona, teniendo una perspectiva de belleza estética.
Es una realidad que los cirujanos cosméticos pueden llevar a cabo cirugías estéticas, ya que se encuentran totalmente calificados para ello. Tienen conocimientos y un alto nivel de formación y práctica que los califica para efectuar todo tipo de técnicas cosméticas.
También, es una realidad que los tratamientos como el Botox, liposucción y la microdermoabrasión se han hecho muy populares entre los hombres, que cada día más, recurren a la cirugía cosmética en busca de soluciones a sus problemas estéticos.
Además, una encuesta realizada por la Academia Americana de Cirugía Cosmética, arrojó como resultado que los cinco tratamientos más populares entre los hombres son:
- El Botox
- El trasplante de pelo
- La restauración
- La depilación láser
- La microdermoabrasión
- La liposucción
Por otra parte es un mito que el aumento de senos puede repara los pechos caídos, ya que existe una forma específica de tratar ese problema y es por medio de un levantamiento de senos.
Es verdad que la mayoría de los hombres tienen la seguridad que su apariencia personal condiciona y afecta su capacidad para triunfar en la profesión o conseguir un ascenso en su puesto de trabajo. Esto a quedado confirmado con una encuesta de consumo que hiciera la AACS, donde el resultado fue que el 83% de los hombres tienen la seguridad que su apariencia personal es fundamental para su éxito profesional.
También es verdad que es totalmente seguro amamantar cuando se tiene un implante de mama. La lactancia, cuando se tiene implantes, es totalmente segura, si bien es cierto que la leche materna puede absorber una cantidad de silicona, pero esto no se considera perjudicial para el bebé. Inclusive el Instituto de Medicina IOM anima a las mujeres que poseen implantes a amamantar siempre que se encuentre en condiciones de hacerlo.
Por otra parte y sobre el mismo tema es un mito que los implantes de seno aumenten el riesgo de sufrir cáncer de mama. Inclusive el Instituto de Medicina (IOM) ha encontrado evidencia que los implantes mamarios no causan cáncer de mama, a pesar que sigue siendo fundamental el someterse a los exámenes de rutina con miras a la prevención.
Es un mito que la liposucción es una manera fácil de perder peso, ya que el cirujano siempre recomienda al paciente que antes de someterse a la liposucción pierda la mayor cantidad de peso posible para que los resultados sean más exitosos.
También es un Mito que la liposucción elimina la celulitis y más allá de borrarla cuando se extrae la capa de grasa que está justo debajo de la piel puede llegar a empeorar la apariencia de la llamada “piel de naranja”.
Y por último es un mito que la grasa vuelve una vez hecha la liposucción. La grasa no vuelve después de una liposucción. Este tipo de tratamiento lo que hace es reducir la cantidad de células de grasa en áreas específicas y una vez eliminadas no vuelven a aparecer.