El deseo de estar en forma, mantenerse en el peso ideal, modelar la figura es un tema que preocupa a hombres y mujeres que encuentran información de lo más variada que es necesario distinguir entre aquella que puede tener algún respaldo científico y otra que no representa una buena dieta ya sea por un desequilibrio en su diseño o por ser totalmente irrealizable.
Generalmente, las dietas más famosas llegan a ser conocidas mundialmente porque son las celebridades del mundo del espectáculo o el deporte quienes dicen hacerlas y cuentan resultados asombrosos.
En realidad, tanta información termina confundido a las personas existiendo hoy varias dietas “famosas” que representan una mezcla de lo bueno y aquello que puede definirse como cuestionable dentro de una dieta para adelgazar equilibrada.
Ciertas dietas trabajan en la reducción del consumo de calorías, en tanto que otras los hacen teniendo como fundamento lo acertado de un consumo alto de proteínas y bajo en carbohidratos como una forma de obligar al cuerpo a quemar la grasa utilizándola como combustible.
También están las dietas basadas especialmente en los “reemplazos” que si bien son cómodos para quienes se encuentran fuera de casa la mayor parte del día, a la larga se transforman en alternativas aburridas y que además no ayudan a cambiar los hábitos alimenticios ya que no promueven una comida sana y con productos frescos y saludables, sino batidos y snacks industrializados.
Comidas preparadas y envasadas previamente, también son una opción útil para las personas ocupadas, pero tienen como contrapartida que la mayoría se basan en recetas altas en carbohidratos que puede ralentizar la pérdida de peso y por otra parte estas comidas preparadas no enseñan a controlar las porciones ni a cocinar con habilidad.
Contar las calorías o el «sistema de puntos» es una buena manera de entender la nutrición y cómo afecta el impacto de los alimentos en el cuerpo, pero la pérdida de peso puede ser lenta, ya que no presenta un buen balance de macronutrientes que es vital para obtener resultados rápidos.
La famosa dieta de Atkins es una de las más conocidas y que desde hace décadas la practican miles de personas a pesar de ser un método que ha generado controversias entre los nutricionistas
Conocida como una dieta cetogénica, se refiere a la utilización de macronutrientes (proteínas, carbohidratos y grasas) que a pesar de ser componentes aptos para formar parte de una dieta para adelgazar el alto consumo de grasa saturada en la dieta es generalmente visto como poco saludable.
En el caso de la dieta Dukan también forma parte de las diez dietas más realizadas en el mundo y considerada por muchos nutricionistas como una opción más saludable que la Atkins ya que incluye vegetales dentro del menú diario.
La Dieta del tipo de sangre es una de las nuevas opciones para adelgazar pero que no cuenta con el sello de aprobación de los nutricionistas en general ya que se basa en la restricción de ciertos tipos de grupos de alimentos en función del tipo de sangre y que la mayoría de los médicos señalan como un estilo de alimentación que puede causar deficiencias nutricionales.
Por último, pero no menos importante la dieta de South Beach, centrada en el índice glucémico, fue diseñada por un cardiólogo estadounidense, es saludable para el corazón y posee un índice glucémico bajo.
Si bien las opciones son muchas y puede en principio resultar una información abrumadora siendo sin embargo necesario informarse en profundidad antes de elegir un plan de dieta que se adapte al estilo de vida y a las necesidades de cada persona como principio importante para tener éxito.