Es muy común en la práctica deportiva la posibilidad de sufrir unalesión y cuando esto ocurre, sin importar si se trata de una práctica profesional o amateur, el atleta desea recuperar con rapidez.
Existe la posibilidad de acelerar la recuperación del área que se encuentra lesionada con el uso de ciertas técnicas como la relajación, meditación y respiración.
Partiendo de la base que la relajación es un vehÃculo ideal para regular la tensión muscular mejorando los movimientos para acelerar la rehabilitación.
En la actualidad se utiliza la psicologÃa del deporte, como una disciplina que aplicada conjuntamente con el tratamiento médico,  le permite al deportista realizar una combinación de diversas técnicas que le ayudarán a superar el problema con una importante reducción del tiempo de inactividad,  y sobre todo ayudándolo a mantener el estado fÃsico y llegando a tener altos niveles de motivación.
Estas técnicas son aplicadas para restablecer al atleta que ha sufrido una lesión que requiere de inmovilización,  ya sea de una parte o de todo el cuerpo. También,  es excelente luego de una intervención quirúrgica que requiera de una re-educación para poder retornar a la actividad.
Por otra parte, ayudan a aliviar el dolor y superar el trauma de volver a lesionarse.
De esta forma, el proceso de recuperación puede acelerarse por medio de la mente y esto se logra repitiendo de manera continua mentalmente todos los ejercicios que a nivel fÃsico  no pueden realizarse mientras la lesión persista.
La mente también ayuda a optimizar el trabajo del fisioterapeuta y con sesiones guiadas por un psicólogo entrenado para esto, el deportista puede imaginar el proceso de curación de la zona dañada.
La respiración es una herramienta excelente para controlar las situaciones de estrés, ansiedad y tensión, ya que ayuda a alcanzar la calma y la relajación, reduce  la tensión muscular y la fatiga.
Asimismo, la relajación mejorará los movimientos hasta que se llegue a un estado que permita un buen trabajo de rehabilitación.
El sufrir una lesión lleva al deportista a dejar de entrenar y como consecuencia de ello verse alejado del objetivo, del grupo con el que compartÃa las prácticas y en el caso de los deportistas amateur de la pérdida, aunque temporal, de la actividad que le servÃa como esparcimiento importante dentro de su vida cotidiana.
Además, deberá enfrentarse con el dolor fÃsico sumado a la inactividad, debiendo modificar todos sus hábitos cotidianos e incorporando tareas para el cuidado y la rehabilitación de su lesión.
Si bien es cierto, que todos aquellos que practican deporte contemplan la posibilidad de tener una lesión y toman las debidas precauciones, al producirse de todas formas la situación que se ha tratado de evitar, se genera un sentimiento de impotencia, frustración, pérdida y miedo y en algunos casos hasta puede llegarse a negar lo ocurrido, desestimando la importancia de la lesión que ha sufrido.
Los médicos y psicólogos deportivos aseguran que es imprescindible para una buena recuperación aceptar lo ocurrido, logrando una visión positiva y constructiva sobre la situación, tratando de percibir que el sufrir una lesión, puede ser la oportunidad para un crecimiento personal, desarrollando nuevas capacidades y una fortaleza a nivel mental para atravesar el problema y superarlo.
Desde el campo de la psicologÃa deportiva el tratamiento tiene como finalidad ayudar al deportista a recuperar la seguridad y la confianza en sà mismo, respondiendo de una manera positiva al hecho de que la lesión existe, disminuyendo la ansiedad y superando todos los temores.
Todo esto puede lograrse cuando la intervención psicológica se desarrolla por medio de una comunicación fluida entre el equipo interdisciplinario que forman el médico, kinesiólogo, entrenador, nutricionista, el preparador fÃsico y el psicólogo, que juntarán sus esfuerzos para lograr una rehabilitación exitosa y en poco lapso de tiempo.
