Frecuente en la población en general y entre los atletas en particular, la rinitis alérgica es una de las causas más comunes del bajo rendimiento deportivo de éstos, pudiendo provocar una morbilidad significativa, siendo importante el diagnóstico precoz a fin de comenzar un tratamiento adecuado.
Para muchas personas el realizar actividad fÃsica de manera frecuente es importante en su vida ya que esta actitud ejerce un efecto favorable tanto para su salud como para su calidad de vida. Por esta razón,  tanto en el diagnóstico como en el tratamiento de enfermedades de tipo alérgico se deben tener en cuenta ciertas pautas particulares.
La rinitis es la inflamación de la mucosa nasal, teniendo como manifestaciones más comunes estornudos, congestión, prurito y secreción y en muchas personas se asocian además sÃntomas oculares y auriculares.
A pesar de tratarse de una enfermedad benigna muchas veces puede estar asociada a otras patologÃas respiratorias como el asma bronquial.
Por otra parte, es una dolencia que afecta la calidad de vida y el funcionamiento fÃsico, aspecto este que es significativamente importante en los atletas.
Existen dos tipos de rinitis la alérgica y la no alérgica y puede ser a su vez persistente o intermitente.
En la última década se ha producido un notable aumento de la rinitis alérgica en la población en general y entre los atletas, quizá como una consecuencia lógica, ya que las personas que practican deportes se ven más expuestos a la polución exterior y a alergenos.
Por otra parte, los atletas que sufre de rinitis alérgica frecuentemente tienen comprometidas las vÃas respiratorias bajas.Un estudio realizado en 214 atletas olÃmpico dio como resultado que el 41% padecÃa de rinoconjuntivitis alérgica, que daba como resultado un significativo descenso de su rendimiento deportivo.
La nariz tiene 2 funciones, que son esenciales, una es la olfativa y la otra es respiratoria, siendo la responsable de filtrar, humedecer y calentar el aire que inhalamos. Todas estas funciones dependenden en gran medida de los vasos sanguÃneos y las glándulas que por otra parte, son reguladas por reflejos del sistema nervioso autonómico. La funcionalidad de este complejo sistema se encuentra comprometida en personas que padecen de inflamación nasal crónica.
Cuando se encuentran entrenando, los atletas se ven expuestos a una gran cantidad de agentes alergenos, aire frÃo y diversas sustancias contaminantes que pueden causar cambios importantes en sus funciones respiratorias, a pesar que algunos deportistas sienten una mejorÃa durante el ejercicio, Â en la mayorÃa la rinitis tienede a empeorar.
Asimismo, existe el agravante que la mayorÃa de los torneos deportivos importantes generalmente se realizan durante la primavera y principios del verano haciéndose en lugares donde hay gran concentración de pólenes y polución. Si se trata de deportes invernales el aire frÃo ocasiona rinorrea y esto en pacientes con rinitis empeora el cuadro.
Otro ejemplo es el de los nadadores que se encuentran expuestos de forma prolongada a los derivados del cloro y pueden verse afectados con la inflamación de la mucosa.
El tratamiento de la rinitis en los atletas,  hecho adecuadamente,  reduce los sÃntomas y minimiza los efectos adverso de la enfermedad. Para ello es importante un diagnóstico precoz y adoptar medidas preventivas especÃficas.
Debe tenerse en cuenta que los tratamientos no pueden transgredir las regulaciones legales con respecto a las drogas y fármacos que pueden utilizar los atletas y en los de alta competencia deben registrarse los resultados antes de que se indiquen las medidas terapéuticas a seguir.
Los antihistamÃnicos de primera generación para personas con rinitis leve a moderada son los fármacos elegidos y los medicamentos más nuevos de segunda generación son útiles además de seguros pero generalmente no alivian la congestión nasal, en tanto que los descongestivos resultan útiles pero normalmente inducen a efectos cardiológicos que pueden ser adversos.
Asà la efedrina y metilefendrina están prohibidos en las altas competiciones y los descongestivos tópicos se encuentran permitidos pero no se recomienda su uso de forma prolongada.
Por otra parte, ciertos antihistamÃnicos más nuevos -levocetirizina, elastina, desloratadina y fexofenadina- dan alivio a la congestión nasal. La azelastina como la levocabastina tienen efectos rápidos y no son sedantes, pudiéndose utilizar sin problemas tanto en el alivio de los sÃntomas nasales como oculares (gotas oftálmicas).
Los esteroides nasales son los más eficientes para aliviar el bloqueo nasal y son la terapia más utiliada en pacientes con rinitis moderada a grave y la inmunoterapia es útil para el control de los sÃntomas de la rinitis aguda, debiendo los atletas realizar ejercicio intenso luego de las aplicaciones.