La mayorÃa de los hombres considera el tatuaje como una marca de virilidad, a pesar que otros eligen esta práctica para dar testimonio de su pertenencia a un grupo determinado. También puede tratarse de otra cosa. En cualquier caso, estamos hablando de una visión masculina del tatuaje que puede tomar diferentes formas y basarse en intereses muy diferentes.
Razones para tatuarse la piel
Todos hemos oÃdo hablar de las comunidades de motoristas que se distinguen por un tatuaje concreto, o de la moda de los tatuajes simbólicos, para los miembros de ciertas fraternidades.
Todo esto para decir que en los hombres el tatuaje puede ser un acto social, tanto o igual a como en su origen el maquillaje marcaba la pertenencia a un clan, a una tribu, o a una comunidad religiosa. Pero las costumbres evolucionan e incluso ciertas comunidades musicales, como los punks entre otros, se reconocen por su tatuaje y otras marcas corporales.
Pero el tatuaje puede ser también un acto profundamente personal. Ciertos hombres se tatúan en homenaje a alguien: una persona querida o un Ãdolo que pretende inmortalizar en su cuerpo. Otros hombres también eligen tatuarse la piel en momentos importantes de su vida.
Pero el tatuaje puede ser simplemente en los hombres una prueba de su virilidad, de su potencia y de su posición. Sobretodo, cuando el tatuaje cubre buena parte del cuerpo, e incluso la totalidad. Pero por otras razones, el tatuaje puede tan sólo ser un «maquillaje» cutáneo.
Los tatuajes más solicitados
De manera general, la elección de un tatuaje procede de una decisión personal, a pesar de que se pueda corresponder con una imagen del clan o de las comunidades. Solemos ver a moteros con un tatuaje sobre el brazo. Pero es relativo. Los grupos de rock se suelen tatuar motivos de los llamados «old school».
Suelen ser imágenes inspiradas en el mundo del rock, de las guitarras, crucifijos, cadenas, etc. Estos tatuajes suelen ponerse en los bÃceps, los omóplatos, el pecho, la parte superior o inferior de la espalda, e incluso detrás del cuello.