Recuperar una rutina de alimentación tras las vacaciones es una de las premisas que muchas personas establecen como prioridad y por ello hoy desde Punto Fape compartimos los mejores tips de una dieta más saludable para la vuelta del verano.
Durante las vacaciones nos relajamos y no solo hacemos comidas más copiosas sino que también cambiamos nuestra rutina de vida, horarios y hasta olvidamos hacer ejercicio… y el resultado a la vuelta son algunos kilos de más.
Volver a la rutina y hacer una dieta más saludable puede incluir también un cambio de hábitos y de estilo de vida pero todo esto no debe representar un gran sacrificio si planificamos e implementamos hábitos nuevos sin pretender adelgazar en una semana los kilos ganados en un mes.
Veamos entonces una manera sencilla pero eficaz de realizar una dieta más saludable para la vuelta del verano y algunos cambios de hábitos que harán más sencillo llegar al éxito.
– Planificar las comidas
Evitar improvisar es importante para no acabar comiendo cosas que no deberÃamos y esto se consigue planificando las comidas y el menú diario que incluirá alimentos como frutas, verduras, legumbres, pescado y carnes magras.
Si tenemos poco tiempo podemos implementar algunos trucos como por ejemplo comprar ensalada online y solo dejar para último momento la preparación del pescado o la carne con la que vamos a acompañar el plato principal.
Además, realizando una planificación de las comidas podemos comprar todos los ingredientes para preparar los platos y asà ahorraremos tiempo y dinero porque dejaremos de adquirir alimentos innecesarios.
Más verduras y frutas en las comidas nos aseguran no solo una alimentación saludable sino también una excelente forma de hacer una dieta balanceada y baja en calorÃas.
Las legumbres no deben faltar en nuestra dieta, sobre todo estas últimas que tienen similares caracterÃsticas a los cereales integrales y aportan al organismo proteÃnas de origen vegetal además de tener fibra.
– Cocinar de forma saludable
Las comidas no tienen que ser aburridas, todo lo contrario, podemos preparar platos sabrosos y coloridos añadiendo por ejemplo diversidad de verduras y legumbres.
Dejaremos atrás los fritos y rebozados que son elaboraciones muy pesadas y volveremos a cocinar los alimentos de forma más saludable como por ejemplo al horno o al vapor, reduciendo también el consumo de sal y experimentar con las especias y hierbas aromáticas.
Podemos aprovechar que en la mayorÃa de los supermercados ofrecen opciones de vegetales frescos envasados y comprar zanahorias online para comer crudas, cocidas y hasta glaseadas, siendo también un delicioso tentempié para picar entre horas.
– Hidratación
Sabemos que hidratarnos es importante tanto en verano como en invierno, pero si además queremos seguir una dieta baja en calorÃas lo ideal es eliminar los refrescos azucarados y el alcohol.
Además, una buena hidratación favorece la digestión y permite que nuestro organismo metabolice adecuadamente los nutrientes.
Si bien el agua es siempre la mejor opción para hidratarnos también podemos incluir en la dieta infusiones y jugos de frutas y verduras frescos.
– Frutos secos y semillas, fuente saludable de ácidos grasos
Añadir a nuestra dieta saludable frutos secos y semillas nos asegura contar con una fuente saludable de ácidos grasos esenciales, pero también aprovechar sus vitaminas, minerales y fibra.
Por ello, es recomendable incluir un puñado de frutos secos y semillas como lino o chÃa diariamente en las ensaladas, pescados y hasta en preparaciones de carnes blancas o rojas, ya que darán un toque delicioso a cualquiera de estas preparaciones.
Tanto los frutos secos como las semillas los podemos adquirir en un supermercado online cuando realizamos la compra semanal de alimentos.
– Establecer horarios
Una vez que planificamos las comidas es recomendable establecer horarios para el desayuno, almuerzo, merienda y cena, pero también marcar una hora para realizar ejercicio fÃsico o simplemente una caminata.
Establecer horarios también nos ayuda a adaptar cada actividad a nuestro estilo de vida y asà volver a tener una rutina, recordando que la cena debe ser siempre una comida liviana para evitar digestión pesada o molestias que puedan interferir en un descanso reparador.
Retomando una rutina diaria que incluya comer bien gracias a una dieta equilibrada, haciendo ejercicio fÃsico regularmente y respetando el tiempo de un descanso reparador será más fácil retomar un estilo de vida saludable para la vuelta de las vacaciones de verano.