Dentro de una presentación de culturismo femenino se inserta una rutina o coreografÃa constituida por diferentes poses que deben realizarse como parte integrante de la muestra al jurado, algo que se hace tanto en la pre-selección como en las poses libres que se realizan con posterioridad, donde los jueces estarán atentos a la simetrÃa y proporción en todo lo referente a definición muscular y forma en general.
En realidad el objetivo de esta coreografÃa es ver una rutina de culturismo bien hecha y con excelentes técnicas de trabajo y lo más importante el cuerpo de la culturista.
Dentro de las poses libres pueden muchas veces disimularse los defectos y mostrar sólo las virtudes. AsÃ, algunas culturistas poseen una buena simetrÃa y por ello realizan poses de frente que las favorecen, por el contrario cuando no tienen muchos cortes en las piernas lo que procurarán es tratar de hacer pocos ejercicios con ellas.
Sin embargo, en la actualidad es poco probable poder engañar a los jueces ya que poseen gran cantidad de conocimientos y criterios bien claros para evaluar a la culturista en su conjunto.
Una culturista con piernas muy débiles luego de la rutina de poses, tendrá que tratar de superar el momento evitando incluir muchos ejercicios de piernas y preparar una rutina de poses lo más dinámica posibles.
Otra cosa interesante es entender como se obtienen los puntos en la rutina de poses, ya que estos son dados por el conjunto y no por una pose en particular.
Por ello, es necesario que la participante posea control sobre sà misma, practicando la rutina un gran numero de veces para hacerla parte de su propio cuerpo.
Lo recomendable es que cada atleta femenina pueda encontrar formas exclusivas para presentarse y presentar su fÃsico.
Por otra parte, en la rutina de poses es posible llamar a atención de los jueces pero hacerlo con el cuerpo como un conjunto fÃsico, ya que en culturismo femenino a pesar que se hagan las mejores poses no significa que se ganará el tÃtulo de Ms Olympia si el cuerpo no logra ajustarse a las exigencias.
Lo importante es siempre mostrar los músculos sea cual fuere la forma en que se realicen las poses. Si la culturista se siente integrada con la música esto se verá reflejado en la rutina. Elegir una música que no sea demasiado popular en las demostraciones de culturismo también ayudará a que la rutina no se haga aburrida para los jueces.
El tipo de música siempre deberá ser acorde a la capacidad atlética y a la personalidad de la participante. Otra opción que funciona bien es la de mezclar música utilizando una lenta y una más rápida se actuará con mayor gracia.
Desarrollar un estilo propio, es algo que los jueces saben apreciar y un elemento clave es también la sensualidad, que toda mujer siempre lleva dentro.