Un arte marcial calificada como versátil y fluida en sus movimientos, son varias las teorías que hablan sobre el Kali, un arte ancestral de las islas Filipinas.
Este ancestral arte de combate utilizado por malayos y polinesios, está considerado en la actualidad como uno de los más peligrosos y también mortales.
Pensado y desarrollado para luchar defendiendo la vida no puede ser considerado como un deporte, tratándose de un arte que se ha ido extendiendo más allá de sus fronteras Kali sigue siendo hoy considerado como «arte de las artes”.
Haciendo un poco de historia es posible ver que las artes marciales filipinas eran tanto una ciencia como un religión, pero a través del tiempo fueron desapareciendo los aspectos espirituales y también los religiosos quedan vivos solo los concepto de tipo científicos, los rituales y el uso de las fuerzas cósmicas, que aún se enseñan.
En la antigüedad el Kali estaba compuesto de tres niveles de aprendizaje el físico, mental y espiritual y a su vez el físico se dividía en 3 categorías de entrenamiento, mientras que el nivel mental estaba formado por siete fases de entrenamiento de las fuerzas cósmicas, incluyéndose el uso de amuletos y por último el aspecto espiritual se componía de aquellas actitudes que llevaban a obtener una unidad con el Creador.
Dominando estos tres niveles quien llegaba a la meta era considerado como “Maestro, grande y verdadero”.
Las escuelas de artes marciales filipinas utilizan hoy varios símbolos cuyo origen es prehistórico pero a los que se les da un concepto moderno. Así, se distinguen por ejemplo el sol con ocho rayos, los triángulos y las estrellas, entre otros.
En relación a las armas utilizadas se distinguen los palos de caña o el Kris que se utilizan también como un símbolo pero añadiéndose un círculo vacío en el área superior, siendo utilizado en el pasado con fines religiosos ya que era el símbolo de la vida después de la muerte.
El Kali es un arte ancestral del cual nacieron otros variados estilos como el «Sirakan», «Kaliradman» o el «Kalirogan». Siendo denominado de diferentes maneras siempre dependiendo de la zona geográfica de la isla, ya que al norte se los llamaba como Arnis y en el sur se denominaba Silat-Kali. Por el contrario y al no ser nunca invadido el sur de la isla el arte Kali se mantuvo tal cual había nacido.
En relación a su nombre, en idioma filipino el término “kalis” se refiere a las armas largas con hoja afilada y posteriormente la palabra se acortó quedando en definitiva el término de “Kali”
Un arte que debió ser escondido de los españoles que invadieron la isla siendo una práctica secreta de las distinta tribus.
Asimismo, sus principios de defensa se basa principalmente por el ángulo por el que llega y no tanto por las características del ataque en sí, existiendo varios ángulos de ataque siempre dependiendo del sistema o método que se practique. Siendo fundamental comprender que los conceptos del movimientos sigue determinadas leyes físicas que no se encuentran limitadas ni pertenecen a ningún sistema o estilo.
En la práctica de Kali cada movimiento sigue a otro y por ello el final de un movimiento será siempre el comienzo de otro nuevo por lo cual se denomina de “cadena” y su enseñanza se basa en el concepto que una persona puede vencer a otra en combate por la superioridad en velocidad, en fuerza o por superioridad en posicionamiento con relación al oponente.