El jogging es un excelente medio para muscular las piernas, y hacer trabajar el corazón. Ritmo cardÃaco y circulación sanguÃnea optimizados es lo ideal para mantenerse en forma. El aquajogging o jogging de piscina utiliza las mismas técnicas de entrenamiento, y los movimientos son los de la carrera sobre el suelo.
El aquajogging
Se trata de un método de entrenamiento, o de fitness que se practica en piscina y en grupo, con un chaleco o flotador en la cintura. La sesión comienza en general por hacer algunos largos para calentarse, y luego sigue un entrenamiento que dura unos 45 minutos. El trabajo puede estar fraccionado con diferentes ritmos, más o menos rápidos.
Lo más importante es que se los movimientos se realicen correctamente, bien con los pies apoyados en el fondo, o en mayor profundidad, donde el esfuerzo es más intenso. El busto se debe mantener derecho, sin levantar excesivamente las rodillas hacia arriba y dejando aparecer la punta de los pies hacia adelante. Si al principio aparecen ciertas dificultades, enseguida se adopta la postura más correcta.
Un deporte para todos
El aquajogging es ideal para recuperarse de una sesión de deporte intensivo, para recuperarse de una herida, sobre todo si se quiere continuar corriendo sin hacerse daño. Este método es excelente para quienes practican regularmente jogging en tierra. Por lo tanto, a priori no hay contraindicaciones, salvo si se tiene miedo del agua o que se nade mal.
Finalmente, se puede practicar independientemente de las condiciones climáticas, lo que es toda una ventaja. El aquajogging es le estimulante cardÃaco que todos necesitamos. El agua provoca una resistencia 15 veces superior a la que se tiene fuera. Esta presión es excelente para la circulación puesto que realiza un masaje natural apoyándose en los músculos.
El resultado: no sólo la frecuencia cardÃaca aumenta con el esfuerzo, de manera suave, sino que se sufre menos que cuando se hace jogging normal, puesto que la sangre remonta hacia el corazón con mayor facilidad.