El calentamiento es una de las partes esenciales de cualquier entrenamiento, tanto en los deportes colectivos como individuales. Los estiramientos son, por antonomasia, la parte anterior al propio entrenamiento, aunque de hecho, es una de las partes más importantes de este, ya que consigue una disminución considerable de las molestias y las lesiones de los propios deportistas, asà como una puesta a punto rápida del cuerpo para poder empezar a trabajar.
Aunque sea mÃnimo, los estiramientos son del todo necesarios para los corredores. Tanto si somos aficionados como profesionales, estos deben hacerse antes y después de los entrenamientos. De hecho, si queremos hacerlo genial, podemos dedicar un solo dÃa a hacerlos, para poner nuestro cuerpo a tono, y disminuir notablemente lesiones.
Por ejemplo, una manera de mejorar la zancada es estirar los tobillos. Bien se trata de un pequeño ejercicio, durante unos 20 minutos debemos ir haciendo pequeños saltitos o punteras, de talones, andar sobre empines, etc, de esa manera, mejoraremos la movilidad del tobillo, y con ello, nuestra zancada.
Otra forma de ponerse activo, es por ejemplo la cuerda, que nos proporciona un sinfÃn de beneficios, como por ejemplo poner en movimiento una gran numero de músculos de nuestro cuerpo, y hacer empezar a levantar las piernas en el suelo. Esto es un simple ejemplo de un buen calentamiento.
Otro gran estiramiento para corredores es ante una barra elevada (o una piedra o escalón o lo que tengamos a mano), abraza la rodilla con el brazo contrario y gira el tronco. Los ruidos que notaremos son exactamente esos músculos y huesos que no hemos estirado correctamente en el pasado, y que ahora nos recuerdan no con poco enfado. Ahora, si te ves con fuerza en tus oÃdos, separa el pie de apoyo, y asà vuelve a intentarlo.
Sin duda, los estiramientos deben ser una parte primordial, antes y después de nuestros entrenamientos, nuestra salud va en ellos