Se trata de una terapia en la que las personas lograr encontrar una armonÃa con ellos mismos y con el resto de las personas.
De esta manera, estando en armonÃa contigo y con tu entorno, no padeces de estrés, graves enfermedades, ni malas relaciones sociales.
No se trata de una manera de pensar ni de una religión, mucho menos de una secta como algunas personas llegaron a creer.
Tampoco está en contra de ninguna de las religiones que se practican alrededor del mundo, simplemente se trata de una herramienta para lograr en cada ser, una estabilidad emocional que beneficie tu salud.
Se puede aplicar a múltiples situaciones de la vida cotidiana, y sirve para evitar una gran variedad de enfermedades. No requiere de una concentración especial para recibirlo, y puede aplicarse de manera muy práctica.
Por ejemplo, es una buena herramienta para aliviar dolores crónicos como el de la artritis, reuma, artrosis, dolores de espalda y lumbares, dolores menstruales y migrañas.
Además, esta terapia ayuda a agilizar procesos de cicatrización, y reducir inflamaciones o dolores musculares.
Por otra parte, es una herramienta útil para predisponer el organismo contra enfermedades de tipo viral, reforzando tu sistema inmunológico. También ayuda a evitar enfermedades como otitis, gastroenteritis e infecciones de la piel.
En cuanto al cáncer, se ha comprobado que la combinación del Reiki con la quimioterapia, ayuda a reducir los fuertes daños de esta última.
De esta manera, logra que la persona sometida a este tipo de tratamientos, conserve la fuerza necesaria para sobrellevarlos.
Además, el Reiki es de gran ayuda para personas inmersas en grandes depresiones, de las cuales les cuesta demasiado salir. De esta manera, mediante el uso de la energÃa, logra equilibrar el ánimo de la persona, y la conexión con su lado más espiritual.
Es por esto, que se dice que el Reiki no se trata de una cura directa de enfermedades, sino de un equilibrio espiritual y emocional, mediante el cual las personas logran sobrellevar sus mayores inconvenientes.