¿Sabéis lo que es el índice glicémico? Antiguamente reservado a los iniciados, el concepto de índice glicémico se considera como uno de los remedios más eficaces para controlar el peso.
El índice glicémico y el control del peso
Desde hace algunos años, sabemos que una alimentación con un bajo índice glicémico ayuda eficazmente a controlar el hambre y la sensación de hambre. Está demostrado científicamente. Y los beneficios para la salud de un régimen de este tipo no se detienen aquí: disminuir los alimentos con un índice glicémico alto permite proteger el corazón, reducir el colesterol malo y aumentar la resistencia. Esto debería interesar a los amantes de los deportes.
Los golosos que se preocupan por su línea pueden alegrarse también. La alimentación con un bajo índice glicémico es fácil de adoptar y no requiere más que muy pocas privaciones.
¿Qué es el índice glicémico?
El índice glicémico permite clasificar los alimentos en función de su efecto sobre la tasa de glucosa en la sangre durante las dos horas siguientes a su ingesta. Cuando el índice glicémico supera 50, el alimento es considerado «hiperglicémico» es decir que conlleva una subida importante de la tasa de glucosa en la sangre, Por reacción, el cuerpo secreta la insulina que transforma la glucosa excedente en grasa.
Este mecanismo muy potente conlleva una tasa de glucosa sanguínea débil. El cerebro reacciona suscitando una sensación de hambre. El círculo se cierra, ya que cuanto más se come, más hambre se resiente.
Las reglas del índice glicémico
Entre los alimentos con fuerte índice glicémico se encuentra el pan (95), el arroz de cocción rápida (85), o los plátanos (60). Entre los alimentos con un bajo índice glicémico están la mayoría de las verduras, o las legumbres como las judías, y las lentejas. Evidentemente, la noción de índice glicémico no se aplica a los alimentos que no contienen glúcidos, como las carnes y el pescado.