Uno de los deportes extremos de los que nunca habÃamos hablado es del barranquismo. Estamos ante uno de esos deportes que se ha práctica toda la vida, esto quiere decir, que los habitantes de los lugares donde hoy en dÃa practicamos barranquismo ya lo realizaban como tal para conseguir mejor pesca, alimentos o simplemente protección, pero podemos hablar del barranquismo moderno a partir del siglo pasado, cuando algunos cientificos y forofos deportistas empezaron a escalar grutas, barrancos y demás.
De hecho, en España las primeras referencias al barranquismo se centran en la zona del alto Aragón, tiene su lógica, ya que en una época en que los mayores esfuerzos estaban en culminar las cimas más altas, los montañistas franceses fueron los primeros en dotar de referencias claras los dos lados de los Pirineos, y más concretamente, fueron Ramond Carbonnieres y Schader los primeros en realizar alguna referencia básica. Aunque a decir verdad, no fue hasta los trabajos de Briet  que se inicia realmente un estudio más detallado.
Podemos diferenciar tres grandes técnicas en el barranquismo, primero la progresión sin cuerda, la segunda con cuerda, y la tercera la técnica en aguas vivas. Las principales diferencias entre ellas, aunque es bastante evidente, son las herramientas y el medio en que estamos. Pero este simple hecho no quita que las técnicas varÃan de forma considerable, y determinan la forma de hacer y proceder. Por ejemplo, cuando hablamos de sin cuerda, tenemos varios aspectos relacionados, como por ejemplo nadar, andar, bucear, saltar o deslizar. Sin duda, como se puede ver estamos ante una complejidad considerable y además, muy motivadora.
Cuando hacemos referencia al barranquismo con cuerda, debemos hablar principalmente de anclajes y nudos de unión de cuerdas, que básicamente resumen los principales elementos de esta técnica. Por último, cuando hablamos de técnica en aguas vivas estamos ante la versión más completa en el descenso de barrancos, de hecho, la falta de control aquà es donde se ven los lÃmites y el verdadero extremo del deporte.
En general estamos ante una práctica deportiva que puede ser muy interesante, y que podemos practicar en España sin demasiados problemas, ya que hay espacios que dan mucho de si. Una alternativa muy interesante para los montañeros.