El Culturismo y los Juegos Olímpicos es un debate siempre vigente y en este momento cuando las Olimpíadas de Londres se encuentran a pleno surge nuevamente la cuestión sobre si el culturismo debería considerarse como un deporte olímpico.
Por supuesto existen quienes están a favor y quienes se encuentran en contra de esto y cada uno esgrime argumentos que deben tenerse en cuenta.
Están aquellos que afirman que si el levantamiento de pesas es desde hace años un deporte olímpico, ¿por qué no puede serlo el culturismo?
Sin embargo, sería preciso comenzar por preguntarse si ¿El culturismo debería considerarse como un deporte?
Haciendo un poco de historia cabe recordar que entre los años 1970 y 1980 hubo un importante intento parta lograr que el culturismo participara en los Juegos Olímpicos como un deporte pero obteniendo siempre una respuesta negativa por parte de los organismos oficiales fundamentando su decisión en el hecho que el culturismo no puede ser considerado como un deporte.
Por otra parte, las definiciones que existen sobre “el deporte” son ambiguas y en el caso del Diccionario de la Real Academia: “Deporte es toda actividad física, ejercida como juego o competición, cuya práctica supone entrenamiento y sujeción a normas.
En tanto que el Diccionario de la Academia Francesa lo define como: “Toda clase de ejercicios físicos, de juegos y carreras de destreza y fuerza, carreras de caballos, competiciones en el agua, caza, esgrima, gimnasia, automóvil, etc.”
Y por último, una definición que expresa la Fundación Australiana de Deportes afirma que el deporte es “Una actividad humana capaz de lograr un resultado que requiere esfuerzo físico y / o habilidad física, que, por su naturaleza y organización, es competitivo y es generalmente aceptado como un deporte”.
Leyendo estas definiciones se podría afirmar que el culturismo se ajusto en cierto modo a todos los conceptos y más aún al último, pero a decir verdad esto no es suficiente para el Comité Olímpico Internacional y a rigor de verdad el problema principal radica en el hecho del uso y en muchos casos abuso de substancias para mejorar el rendimiento de los culturistas, algo prohibido en las políticas de este tipo de competición.
Existen reglas antidopaje que además de ser severas hacen que se vigile de cerca de los competidores olímpicos que excluye a los culturistas profesionales.
Pero este argumento podría ser para aquellos culturistas que utilizan drogas para mejorar su rendimiento y resultados físicos, algo que no ocurre con aquellos que se encuentran dentro del body building que no utilizan substancias.
Otra de las razones que ha esgrimido el COI para no incluir el culturismo es el hecho que la decisión del jurado es totalmente subjetiva, ya que se evalúa la armonía física y esto puede resultar diferente para cada persona.
En la actualidad, el programa olímpico está compuesto por disciplinas deportivas y se desarrollan eventos de todas ellas, pero por ahora la discusión sobre el culturismo prevalece y el obstáculo sigue siendo el Comité Olímpico Internacional y el OPC que continúan afirmando que el culturismo no es un deporte y por lo tanto no tiene un espacio dentro de las competencias de los Juegos Olímpicos.