Muchos hombres no consideran que su entrenamiento es completo hasta que no logran desarrollar la zona anexa al cuello y los hombros, para autoregalarse un aspecto más contundente.
Es cierto. Unos trapecios voluminosos otorgan ese aspecto de luchador de pressing catch que cierran de alguna manera el cÃrculo de la muscularidad.
Por lo general, se suelen trabajar a la par que los hombros, reservándoles siempre un ejercicio o dos a lo sumo al final, con lo que su desarrollo siempre está condicionado.
Antes de comenzar a aconsejar un buen ejercicio para el trapecio, hay que decir que, en la mayorÃa de las ocasiones, y, al igual que ocurre con otro músculos, el desarrollo del trapecio o por lo menos su forma, es congénita.
Hay personas que por su disposición estructural, desarrollan unos trapecios y un cuello muy voluminoso sin apenas trabajarlo, y otras que, por más que lo trabajan, nunca consiguen los resultados deseados.
En cualquier caso, si alguien quiere desarrollar sus trapecios, tiene que trabajarlos sà o sÃ, y para eso, un buen ejercicio de cabecera serÃan las elevaciones al cuello.
Elevaciones al cuello
Este ejercicio se ejecuta en una polea con barra corta recta. Está situada en el suelo desde donde se cogerá con las manos. El cuerpo ha de estar recto y firme y los brazos estirados hacia abajo con la barra en la mano.
Las manos cogerán la barra en su parte interior, de manera que éstas se aproximen entre sà lo bastante como para casi tocarse. Las palmas deberán estar mirando hacia nosotros.
En ese momento subiremos la barra con la fuerza de los trapecios, con una inevitable flexión de los codos hacia dentro, que es lo que permitirá que los trapecios trabajen.
Una vez la barra haya llegado a la altura del cuello frenaremos la subida y comenzaremos el descenso, siempre de manera retenida y continuada hasta abajo.
Músculos involucrados
En este ejercicio no sentireis la entrada de otros músculos en acción puesto que es un movimiento muy cerrado y especÃfico en el que ningún otro músculo tiene que intervenir.
Errores más frecuentes
El principal error que se puede cometer es a la hora de posicionar los brazos. Hay que ser muy estrictos con la postura puesto que variar lo más mÃnimo, podrÃa no hacer trabajar al trapecio como debe, y no lograr los resultados deseados.
Sin duda, el desarrollo de unos buenos trapecios, os proporcionará ese aspecto masculino que muchas miradas están esperando.