«Yo voy al gym, apenas tengo como una semana y me duele mucho el cuerpo, ya se que es por el ejercicio pero, ¿cómo le hago para que ya no me duela?». Esta es una de las preguntas mas comunes que dejan los visitantes en los comentarios.
Y aunque hay información publicada sobre que son las agujetas y como tratar el dolor por agujetas, la consulta sigue siendo frecuente. Veamos rápidamente que podemos hacer en relación a esta consecuencia que el ejercicio fÃsico deja a los novatos.
La mayor parte de las personas que ha realizado ejercicio como principiantes e incluso en alto rendimiento, ha sufrido lo que comúnmente denominamos agujetas. Pero, ¿Qué son en realidad?.
Las agujetas, también llamadas dolor muscular tardÃo (DMT), son como su nombre lo indica dolores musculares que aparecen pocas horas después de haber concluido el ejercicio y alcanzan su pico de dolor entre las 24 y 48 horas después.
Estos dolores aparecen debido al sobreesfuerzo que supone la actividad preferentemente de tipo excéntrico, cuando el músculo se alarga, en sujetos que no están acostumbrados a ella.
Normalmente los dolores se localizan en aquellas zonas donde el músculo más se ha podido estirar y más tensión ha soportado durante la contracción, provocándose destrucción muscular a nivel microestructural en el tejido conjuntivo del músculo.
¿Cómo podemos evitar las agujetas?
La conseja de tomar agua con azúcar o agua con soda es completamente ineficaz, lo mejor consiste en trabajar sobre la prevención para que estos dolores no aparezcan o sean reducidos.
Si no hemos empezado a entrenar, lo mejor es respetar el principio de progresión de la carga, que dependerá del nivel de fuerza inicial de cada sujeto, a partir de ahà iremos aumentando la carga de los ejercicios por lo general de semana en semana.
También es fundamental que estiremos los músculos trabajados tanto al principio como al final de la actividad, pero sin abusar porque puede ser peor.
Pero si estamos padeciendo el dolor de las agujetas luego de entrenar, que es lo normal, nos centraremos en estos tres consejos:
1. Aplicar frÃo y masajes en la zona afectada.
2. Tomar algún analgésico para combatir el dolor, y vitamina C como antioxidante.
3. Realizar ejercicio moderado, ya que gracias a las endorfinas nos proporciona placer y lleva nuestra atención hacia otros músculos menos afectados.