Hoy en deportes hablamos de deportes acuáticos, y más concretamente, hablaremos de la natación. No hace falta muchas presentaciones de uno de los deportes más antiguos de la historia de la humanidad, de hecho, no sabemos cuando surgió la natación, ya que se trata de un elemento humano tan integrado como puede ser correr o saltar, es una habilidad que aunque entrenable y desarrollable viene innata en nosotros.
Pero lejos de esto, ya se conocen competiciones de natación entre los antiguos griegos y romanos, y en nuestra época contemporánea, la natación es uno de los deportes reyes en las olimpiadas modernas, asà como una práctica muy extendida entre muchos deportistas y aficionados al deporte. La razón de esto es simple: la natación por sus caracterÃsticas reune condiciones que la hacen trabajar todos los grandes grupos musculares, además, al no haber erosión, también puede ser practicado por gente que por problemas no pueden practicar otros deportes.
Los beneficios de la natación son extensos, por ejemplo, en el sentido cardio-vascular, la natación al ser aeróbica, es una arma para que nuestro corazón mejore y esté más sano, al perder las grasas de su alrededor el corazón se hace más fuerte y gana en potencia de latidos.
La natación también mejora substancialmente la frecuencia respiratoria, ya que formamos a nuestro cuerpo a respirar de forma correcta, y augmentar la capacidad pulmonar, por no hablar que también limpia nuestros pulmones. En términos de músculos, ya hemos dicho que con la natación se trabajan todos los grandes grupos musculares, lo que es un trabajo completo para el cuerpo.
También hay otros beneficios, que son también atribuibles al deporte en general: la mejora de nuestra calidad de vida, de nuestra sensación de bienestar, asà como estar más cómodos con nuestro cuerpo y sentirnos más activos. Sin duda, la natación nos comporta una serie de ventajas que debemos tener en cuenta a la hora de escoger nuestro deporte.