Hacer ejercicio ya es demasiado complicado como para encima tornarlo incómodo. Por eso te recomiendo seguir estos consejos que, aunque no lo creas, pueden llegar a solucionar tu rutina deportiva.
La vestimenta influye y mucho a la hora de hacer deportes. Si sales a correr en pleno invierno y no sales lo suficientemente abrigado, lo más probable es que termines con un resfriado o te canonicen por mártir. Evita los malos tragos y has caso a lo que sigue.
El gran lema para tener en cuenta cuando quieras practicar un deporte es vestirse cómodo. No importa si se trata de un producto de una marca de última moda; si no te sientes cómodo con él, mejor deséchalo. De esta forma si pruebas tu ropa antes de ir al gimnasio, evitarás molestias o fricciones al momento de ejercitarte.
Existen diversos tipos de deportes, por ende muchas maneras de vestirse. Si por ejemplo quieres jugar baloncesto, deberás ponerte unos shorts y una camiseta en lo posible de algodón, para estar bien fresco.
Si practicas ciclismo o patÃn, debes usar siempre dispositivos de seguridad como cascos y protectores de muñeca, rodillas y codo. Si realizas deportes muy exigentes, como el fútbol o el rugby, las tobilleras pueden resultar tus mejores aliadas para prevenir lesiones de tobillo.
Del mismo modo es importante tener bien en claro qué ponerte si debes estar al aire libre. Todo depende de las condiciones climáticas y si es de dÃa o de noche. Si se trata de un dÃa soleado, es fundamental el sombrero, protector solar, anteojos, y ropa clara, pues la oscura atrae los rayos solares. Y no debes olvidarte tu botella de agua para estar hidratado en todo momento.
Para los ejercicios nocturnos al aire libre, se recomienda el chaleco e indumentaria clara que refleje la luz. También utiliza calcetines que no sean ni muy gruesos ni muy finos. Los extremos no son muy buenos, o te mueres de calor o te lastimas. No está de más aclarar, que todo dependerá también de la estación del año en la que te encuentres.
Este consejo es dirigido a aquellos atletas que entrenan continuamente. Si sales a correr, colócate una prenda que transpire bien y un calzado adecuado que proporcione una buena amortiguación y contenga ventilaciones para los pies. Lo mismo si sales a caminar, ponte unas zapatillas bien cómodas y abrÃgate acorde a la temperatura exterior.
Recuerda, la comodidad es la base de toda vestimenta deportiva, si ésta no cumple con tal requisito corres el riesgo de sufrir una lesión o bien abandonar tu ejercitación por no sentirte a gusto con tu ropa.  Sigue estos consejos y verás como tu rutina se convierte en un lugar armónico y liberador de tensiones.